La Cámara aprobó la Reforma Legislativa, pero mantuvo el salario base

La Cámara de Representantes aprobó a altas horas de la noche del martes la eliminación del pago de dietas y estipendios de automóviles, pero mantuvo el salario base de $73 mil anuales, al tiempo que permite que los legisladores ejerzan sus profesiones sin limitar cuánto dinero pueden generar en el ámbito privado.

La medida ordena además la reducción del gasto legislativo en 30 por ciento.

Aunque la portavoz de la minoría del Partido Nuevo Progresista (PNP), Jenniffer González, solicitó la abstención de la delegación, el presidente de la Cámara, Jaime Perelló, denegó el pedido por lo que la medida fue aprobada con 26 votos a favor y 23 en contra.

Pese a que el proyecto no fue consultado con el Senado, el presidente de la Cámara baja, rechazó que la aprobación de esta medida se trate de una lucha de poder con la Cámara alta, y aseguró que cuenta con el aval del gobernador Alejandro García Padilla.

Antes de la aprobación del Proyecto de la Cámara 832, el presidente del Senado, Eduardo Bhatia, adelantó que la medida sería considerada en vistas públicas. Perelló dijo que no tiene problemas con las audiencias, pero “lo importante es que se apruebe lo antes posible”.

Previo a la aprobación, hubo un receso de casi cuatro horas en el hemiciclo y fuentes de EL VOCERO apuntaron que el retraso se debía a que la mayoría no tenía los votos para aprobar la medida.

La portavoz de la minoría del PNP denunció la ausencia de audiencias públicas previo a la aprobación y la falta de un Código de Ética como parte del proyecto. González criticó además que la medida convierta a los legisladores en “los trabajadores ‘part time’ (a tiempo parcial) mejor pagos del País’’.

Mientras, el representante José Aponte fue el encargado de asumir el turno más enérgico de oposición de la minoría.

“Ha sido un honor y no un riesgo que mi delegación me haya dado la oportunidad de establecer para récord lo que debe ser una verdadera reforma legislativa. Y la reforma legislativa no es cuestionarle el futuro y la seguridad de la familia de los miembros de la Asamblea Legislativa; por cumplir promesas de campaña no podemos seguir actuando de forma hipócrita”, sentenció Aponte.

La medida aprobada mantiene el salario anual de $73,775 para los legisladores. Mientras, los vicepresidentes de cada cámara recibirán un salario de $84,841, y el salario de los presidentes de los cuerpos legislativos será de $110,663. A estos dos últimos se le prohíbe obtener ingresos de otras fuentes.

El Presidente de la Cámara justificó el que se mantenga el salario base de los legisladores porque con la eliminación de las dietas y estipendios “se reduce unos $48 mil anuales de sus ingresos”.

Sobre las críticas de la minoría legislativa, Perelló aseguró, en entrevista con EL VOCERO, que el Código de Ética y la presidencia de ambas cámaras se encargarán de garantizar que los miembros de la Asamblea Legislativa cumplan con su trabajo en Cámara y Senado. Insistió además en que los legisladores que quieran ejercer sus profesiones tendrán que ajustarlas al horario de las funciones legislativas. Rechazó que los legisladores vayan a trabajar a tiempo parcial en el Capitolio.

El líder cameral garantizó que no habrá sesiones de noche y que las comisiones se seguirán reuniendo durante horas del día.

Por otra parte, la limitación al pago de dietas excluye a los miembros de la Asamblea Legislativa “que no reciban salario anual por estar acogidos a algún sistema de pensión”. El monto de las dietas para estos legisladores se mantendrá igual, entre $150 y $162 por vista o sesión.

Además, la nueva figura del legislador ciudadano “no disfrutará de ciertos beneficios que son comunes para los demás empleados públicos, tales como acumular y recibir pago por vacaciones regulares, o por enfermedad, recibir pago de bono de navidad o pago global al finalizar sus funciones”.

En tanto la reforma legislativa es aprobada por el Senado y el Primer Ejecutivo lo convierte en ley, los legisladores de la Cámara renunciaron ayer a sus dietas, y se supone que cada representante informe a la presidencia a cuál organización sin fines de lucro donará el dinero.

Una vez el Gobernador estampe su firma en el proyecto, el dinero por concepto de dietas será destinado al presupuesto de la Cámara de Representantes.

Perelló aseguró a EL VOCERO que este dinero no se convertirá en los llamados “barriles de tocino” y que tampoco se gastará en contratación externa o asesores. Indicó que a su discreción, y en conversación con los representantes, los fondos serán destinados a las necesidades apremiantes del País. Trajo como ejemplo el $1 millón que la Cámara asignó al Departamento de la Familia para investigar las querellas de maltrato infantil.

La medida establece que la ley comenzará a regir 30 días luego de su aprobación para permitir que ambas cámaras puedan discutir y aprobar un Código de Ética.

Perelló explicó que la Comisión de Ética será reformada para que incluya representantes del interés público ─ designados por la mayoría y la minoría ─ para que fiscalicen y tomen decisiones en caso de que se refiera a algún legislador a la comisión por faltas éticas.

Sobre la eliminación de la segunda sesión ─ también compromiso de campaña del PPD─ Perelló sostuvo que el Primer Ejecutivo no tuvo reparos en que fuera excluida de la reforma legislativa porque a la larga lo que se buscaba era reducir el gasto en dietas. No obstante, no descartó que pueda ser considerado en el futuro en un proyecto por separado.