Análisis Económico – Carlos A. Colón de Armas

No lo hagan
Published June 8, 2013 | By Carlos A. Colón De Armas
La economía de Puerto Rico se está desplomando. Así lo evidencian los indicadores económicos.

Desde diciembre de 2012, el índice de actividad económica del Banco Gubernamental de Fomento para Puerto Rico ha descendido con respecto al mismo mes del año pasado por cinco meses consecutivos. Cada mes, esa merma ha sido mayor a la del mes anterior, culminando con una reducción de ‑3.5% en abril de 2013, su mayor descenso desde septiembre de 2010.

Entre diciembre de 2012 y abril de 2013, se han perdido 9,000 empleos y 33,000 personas han dejado de buscar trabajo. De enero a abril de 2013, la producción de cemento bajó por ‑16.2% (vs. un aumento de +2.7% de enero a abril de 2012), las ventas de cemento bajaron por ‑15.8% (vs. un aumento de +4.8% de enero a abril de 2012) y las quiebras aumentaron por +3.4% (vs. una reducción de ‑8.8% de enero a abril de 2012).

Dentro de este marco de debilidad económica, las ramas ejecutiva y legislativa del Gobierno de Puerto Rico se encuentran discutiendo, entre sí y con organizaciones del sector privado, cuál es la mejor forma para aumentar impuestos. En su lugar, deberían estar analizando las formas de reducir los gastos del gobierno para evitar esa alza en impuestos.

En todas las discusiones sobre las diferentes medidas para aumentar impuestos, se ha ignorado por completo la posibilidad de reducir el presupuesto propuesto por el gobernador García Padilla y así evitar, o al menos reducir, la necesidad de nuevos impuestos. Si analizamos el presupuesto, sin embargo, notaremos grandes inconsistencias entre lo que se ha dicho públicamente para sustentar el aumento de $752 millones y los datos oficiales. Además, observaremos aumentos en partidas que debieran reducirse y partidas reducidas que se discuten como si fueran a aumentarse.

Por ejemplo, para el año fiscal corriente, el déficit proyectado es de $917 millones (el cual se debe reducir a alrededor de $600 millones a base de los recaudos hasta abril de 2013) y no los $2,200 millones que se repiten casi a diario. El pago de deuda de años anteriores se reduce por $14 millones y el pago del resto de la deuda solamente aumenta por $131 millones, lo cual se traduce en un aumento neto de $117 millones, y no los $250 millones que se repiten continuamente. Mientras tanto, se propone aumentar la nómina por $59 millones y se asignan CERO dólares para mejoras permanentes.

Una economía tan débil como la nuestra tiene una capacidad limitada para pagar nuevos impuestos. Esa capacidad limitada debe reservarse para que, en caso de ser necesario, se pueda usar para financiar inversión pública, en lugar de utilizarla para cubrir gastos públicos y para financiar un presupuesto cuyos números no están claros.

Aumentar impuestos para gastos, y no para inversión, sería un grave error y representaría un riesgo adicional para nuestra frágil economía. Por favor, ¡NO LO HAGAN!

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Nota: Este escrito fue publicado en el periódico El Vocero, 7 de junio de 2013, página 20.

Copyright (Derechos Reservados) © 2013, Carlos A. Colón De Armas

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