La Recta de Llegada a la Separación.
Por José C. Barbosa Muñiz

Los puertorriqueños hemos aprendido que los peores enemigos de la Independencia son precisamente los Independentistas, o Separatistas. Los únicos que han vencido son los colonialistas Populares y Penepeístas Pseudoestadistas. Análogamente, los peores enemigos de la estadidad han sido tradicionalmente los estadistas sinceros del PNP, que evitan decir que son americanos como nuestros conciudadanos.

Si el lector concurre con el párrafo introductorio, como estadista sincero que soy, tengo que dar un alerta sorpresivo: Ya el gobierno de Alejandro García Padilla ha puesto al líder que puede llevar a Puerto Rico a la independencia. Se trata del Dr. David Bernier, expresidente del Comité Olímpico de Puerto Rico (Copur) y hoy Secretario de Estado de Partido Popular. Esta opinión es muy arriesgada pero hay mucha evidencia que señala en esta dirección, por el éxito que ha tenido el Dr. Bernier y su manera de hacer política de separación como lo más natural y sin la animosidad que los líderes independentistas demuestran contra los conciudadanos americanos.

El Dr. Bernier, que es un simpático líder deportivo, también ha sido un firme creyente de la Identidad Internacional de Puerto Rico. El, al igual que muchos boricuas y miembros del PNP, entiende que nuestra identidad nacional nos separa de los conciudadanos americanos de estados federados y de territorios americanos. El joven Bernier es un ex-esgrimista destacado que es la estrella olímpica más importante en los últimos años. Además, es un profesional de la Salud y conoce las maquinaciones de la política pequeña pero desde su olimpismo es un creyente en la soberanía deportiva, como muchos equivocados PNP’s y de cualquier otra creencia en Puerto Rico. Como líder, Bernier Nunca insulta ni demuestra nacionalismo chabacano, sino que muestra respeto a todos y los atrae a sus objetivos que son constructivos y que le ofrece al interlocutor contribuciones.

En su desempeño magisterial ha seguido propagando certificados de identidad puertorriqueña sin anunciarlo a los cuatro vientos, sino como una de las funciones rutinarias del Departamento de Estado del Estado Libre Asociado. Claro está, que esos certificados son la declaración oficial que los puertorriqueños NO somos americanos. Sin embargo, no lo hace con los desafíos de otros independentistas sino como una cosa natural y rutinaria que sin alarmar al estadista, lo prepara para aceptar la separación como algo natural.

A pesar de los esfuerzos de “Tiempo Estadista” y otros sacrificados americanos de P.R., los separatistas tienen la Prensa, y todas las organizaciones llamadas culturales que son netamente separatistas. Por eso, no es una exageración señalar al Dr. Bernier como el tipo de separatista que lleva a los puertorriqueños hacia la independencia, a través de sus gestiones como servidor del gobierno colonial de P.R. Además, ha conseguido muchas concesiones de los federales para ir avanzando la idea que P.R. es ya de hecho un país separado de los Estados Unidos de América.
¡DESPIERTA ESTADISTA!