Pierluisi fue enfático en señalarle al Primer Mandatario en que no es el momento idóneo para jugar con estrategias de última hora.

“Le recuerdo al Gobernador que en este momento lo que principalmente está bajo evaluación en los mercados de bonos es el desempeño de su administración en el manejo de nuestros retos económicos y fiscales. Basta ya de lamentos y pretextos. Es hora de tomar buenas decisiones”, dijo Pierluisi.

“Recurrir al mercado en momentos en que pudiéramos tener que pagar intereses excesivos sería un grave error, pues pudiera tener un efecto dominó en las demás emisiones de bonos que tengamos que hacer en el futuro cercano”, agregó.

Temprano ayer, las expresiones de García Padilla contrastaron con las de su correligionario, el senador Ángel Rosa, quien catalogó de ‘suicidio’ el que Puerto Rico opte por ir al mercado de bonos. Rosa, un también reconocido profesor y experto en temas económicos, advirtió que la degradación de bonos es una inminente.
“En vez de mirar hacia atrás para distorsionar la realidad, el Gobernador debe actuar con la mayor prudencia y sabiduría por el bien de nuestro pueblo”, apuntó Pierluisi.

Somete propuesta para aliviar la economía

Por otra parte, Pierluisi informó que radicó un proyecto el cual pretende mejorar el sistema de educación, aumentar la seguridad y reducir la deuda pública en Puerto Rico.

La propuesta fue presentada ante la Comisión de Finanzas del Senado federal que destinaría cualquier aumento en la carga contributiva de las corporaciones foráneas controladas (CFC) a bajar el costo de la luz y el agua, mejorar el sistema de educación, aumentar la seguridad y reducir la deuda pública en Puerto Rico.

El borrador de discusión de la Comisión de Finanzas no atiende de forma separada la tributación de las subsidiarias de corporaciones americanas que hacen negocios en los territorios estadounidenses y pide comentarios al respecto.

En su carta al Presidente y al Portavoz de la Minoría de la Comisión, los senadores Max Baucus y Orrin Hatch, Pierluisi reclamó que se considere favorablemente su propuesta, dado el hecho de que Puerto Rico y los demás territorios encaran severos retos económicos y fiscales.

Además, expuso que aunque Puerto Rico y los otros territorios son tratados como “internacionales” para algunos propósitos bajo el Código de Rentas Internas de Estados Unidos, son jurisdicciones de Estados Unidos, están pobladas por millones de ciudadanos americanos y los empleos en esos territorios son empleos americanos.

Por consiguiente, la meta de la reforma contributiva—promover inversión y empleo en Estados Unidos—no se logrará si las disposiciones incluidas en la legislación tienen el efecto de desalentar la inversión y la creación de empleos tanto en Puerto Rico como en los demás territorios.

Pierluisi enfatizó en una misiva que “los problemas económicos de Puerto Rico están intrínsecamente ligados a su estatus político.

“Favorezco la Estadidad para Puerto Rico en gran medida porque la historia demuestra que todo territorio que se une a la Nación experimenta un aumento significativo en su actividad económica y en su calidad de vida. La Estadidad es el único estatus que le permitirá a Puerto Rico, de forma sostenible, reducir su desempleo, atraer inversión, retener su talento, promover su crecimiento, y manejar adecuadamente su déficit y su deuda pública,” insistió el Comisionado Residente.

El aspecto principal de la reforma contributiva que está ante la consideración del Congreso conlleva la imposición de una tasa contributiva mínima a todos los ingresos de las subsidiarias de empresas americanas que hacen negocios en el extranjero, incluyendo en los territorios. Estas subsidiarias tendrían que pagarle al tesoro federal la diferencia entre la tasa contributiva que paguen en el extranjero o en los territorios y la nueva tasa mínima requerida.