Como si la crisis económica no fuera suficiente, la implementación del nuevo Impuesto de Venta y Uso (IVU) de 11.5% ha sido un nuevo cantazo para el bolsillo de los artesanos.
Algunos artistas consultados dijeron que ahora tienen que pagar más dinero por la compra de materiales, y contrario a otros comerciantes, los artesanos absorben ese aumento ya que por ley no pueden cobrar el impuesto a los clientes.
“Ya lo estamos sintiendo en la compra de los materiales”, sostuvo el artesano José Rafael Figueroa, que se dedica a hacer piezas en cuero.
“Un paño de piel me puede costar $100 y con el impuesto aumenta $11.50 más. Nos sube la materia prima», indicó Figueroa, al señalar que el reto de los artesanos es que no pueden subir los precios de sus artículos porque, si lohacen, no se venden.
Igual opinó la artesana Ludiscalí Negrón, al destacar que muchos artesanos tienen que mantener sus precios económicos porque, como ella, compiten con otras tiendas que venden accesorios de vestir.
“Yo he tenido que dejar los precios cómodos para el público, pero todo está más caro para diseñar», destacó Negrón, quien confecciona accesorios en cuero y metal.
Para el artesano Iomar Pérez, que también trabaja obras en cuero, el IVU agrandado se ha traducido para él en pocas ventas.
«La gente está asustada por los problemas que puedan venir a raíz de todo esto», manifestó.
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