QUBRADILLAS – Los caminos de este pintoresco pueblo sirvieron de escenario para que dirigentes del Partido Nuevo Progresista (PNP) avivaran a sus seguidores con una de las más tradicionales formas de celebración rural, una cabalgata.

Así que ayer en la tarde muchos de ellos sacaron su sombrero de vaquero, camisas a cuadros, botas de cuero, y se juntaron en el potrero Criadero Muñiz, para llevar a cabo la caravana ecuestre, y de paso recolectar fondos para el partido.

Antes de cabalgar hubo espacio festejar y para bailar rock and roll, aunque del baile se encargaron mayormente las damas presentes.

Luego empezaron a llegar los invitados importantes: José Aponte, Gabriel Rodríguez Aguiló, Carlos Romero Barceló, Thomas Rivera Schatz, Gary Rodríguez, Pedro Pierluisi, Ángel «Chayanne» Martínez, «Joíto» Pérez, Héctor Martínez.

Al comisionado residente en Washington, Pierluisi, le esperaba un elegante corcel negro paso fino, llamado Juramento de mis Sueños, hijo de Fantasma de las Palmeras, según explicó su dueño, Santiago Walker.

«Es bien dócil, con buen arreglo. Está castrado, para que sea más tranquilo, para que lo monte el nene», abundó Walker, añadiendo que Pierluisi ya lo había montado.

Entretanto, el exgobernador Romero Barceló se subió a un caballo blanco. A pesar de que ya no es un joven, mostró habilidad como suele hacer con su aún locuaz discurso. Tras un poco de resistencia y algunos movimientos medio erráticos, puso al caballo bajo control, demostrando que también conoce lo suficiente sobre ser jinete y colocándose a la cabeza de la caravana.

Rodríguez Aguiló parecía por momentos tener un poco de problemas para controlar su caballo. Gary Rodríguez prefirió no montar.

Rivera Schatz, en tanto, se subió a una yegua mora de su propiedad que manejaba a gusto y con autoridad.

Aponte, mientras, intentó cabalgar guiando una yegua color castaño con una sola mano y empuñando la bandera con el símbolo de su partido en la otra, pero tuvo que desistir y soltar la bandera, pues al parecer el sonido que hacía al moverse con el viento agitaba demasiado a la yegua. «Si no fuera porque se quién es el dueño, pensaría que es popular», bromeó Aponte sobre la yegua, propiedad de Rivera Schatz.

Pierluisi no tuvo mayores contratiempos en subir a su caballo. «Ya conozco este caballo. Yo lo he montado antes. Y yo le tengo un nombre, Igualdad», afirmó el comisionado residente ya montado sobre el caballo.

«Esto es una cabalgata. Ya lo he hecho antes. La última vez lo hice por Orocovis. Esa era más difícil porque allí había mucha montaña. Pero esta la estamos haciendo para recaudar fondos para el Partido Nuevo Progresista, para compartir entre buenos penepés y estadistas», comentó Pierluisi, minutos antes que arrancara la caravana. «En mi caso yo lo hago de cuando en cuando, pero lo disfruto. En Puerto Rico es algo que se estila, que le gusta a mucha gente hacer estas cabalgatas, y nosotros vamos a tener una fabulosa».