El presidente del Partido Nuevo Progresista (PNP) y comisionado residente en Washington, Pedro Pierluisi, criticó severamente a la administración García Padilla por provocar hoy el primer impago de las obligaciones financieras del Gobierno de Puerto Rico en su historia, al no pagar el principal e intereses de los bonos de la Corporación para el Financiamiento Público (PFC, por sus siglas en inglés) que vencen oficialmente hoy, lunes, 3 de agosto.
“Hoy es un día nefasto en la historia de Puerto Rico. Por primera vez en su historia, el Gobierno de Puerto Rico deja de pagar sus obligaciones. Las consecuencias de esta irresponsabilidad serán bien duras para todos los puertorriqueños”, señaló Pierluisi. “Mi mensaje, tanto al Pueblo de Puerto Rico como a los mercados financieros, es que los meses de esta gestión irresponsable e improvisada están contados. Y que Puerto Rico volverá a tener una administración que le devuelva el valor a la palabra empeñada”, añadió.
El presidente del PNP criticó que el Gobierno admitiera que dejó de pagar estos bonos sencillamente porque al no tener una garantía tan sólida– como, por ejemplo, la garantía constitucional que protege a las obligaciones generales o “GOs”– los tenedores de esos bonos tienen pocos remedios legales que los asistan.
“Básicamente, lo que están diciendo es que como a estos bonistas les va a resultar más difícil prevalecer en una demanda, que se fastidien. Eso es una irresponsabilidad y una crueldad, pues una buena parte de esos bonistas son individuos, instituciones y cooperativas locales, aquí en Puerto Rico, muchos que dependen de esos dividendos para su retiro, y que se ven pillados por un gobierno que tiene el dinero para pagar pero que ha decidido no hacerlo”, señaló Pierluisi.
El líder del PNP reiteró además una alegada falta de capacidad y voluntad de la administración de García Padilla para negociar con los acreedores de otras corporaciones públicas del gobierno de Puerto Rico a fin de establecer nuevos términos para el repago de sus deudas. Denunció que lo que se percibe es que hay una estrategia para llevar al gobierno al impago, o incumplimiento de sus obligaciones, lo que advirtió será devastador para Puerto Rico.
“Lo que hemos visto en los pasados meses es una total incapacidad y hasta una falta de voluntad de negociar de buena fe con los acreedores de nuestras principales corporaciones públicas, en la medida en que sea necesario, para reestructurar los términos de sus respectivas deudas. Lo que se percibe es que hay una estrategia para llevar primero al Gobierno de Puerto Rico a una situación de impago, o sea, incumplimiento con nuestras obligaciones, y entonces tratar de reestructurar la totalidad de la deuda pública en circunstancias que ellos entienden serían más desventajosas para los bonistas”, señaló Pierlusi, quien recordó que al menos una cuarta parte de los bonistas del gobierno y sus instrumentalidades son residentes y entidades de Puerto Rico.
“Además del impago de hoy de los bonos de la PFC, es claro que los funcionarios del gobierno actual se disponen a gastar en otras cosas el dinero que está reservado para el pago de principal e intereses durante este año fiscal. Esa es una estrategia totalmente equivocada y desenfocada. De hecho, va a ser desastrosa para Puerto Rico porque va a resultar en una avalancha de costosos litigios y va a acabar de eliminar cualquier credibilidad que le pueda quedar al Gobierno”, señaló Pierluisi.
El comisionado residente dio como ejemplo las deudas de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) y del Banco Gubernamental de Fomento (BGF).
“El mejor ejemplo es la AEE. Próximamente se cumple un año de que la Autoridad dejó de pagar algunas de sus deudas y está operando bajo un acuerdo de indulgencia con sus acreedores. Llevan un año gastando millones de dólares en firmas de asesores y no acaban de llegar a un acuerdo sobre nuevos términos para el pago de su deuda. Hace rato que esa negociación pudo y debió haber terminado”, denunció Pierluisi.
Igualmente, Pierluisi señaló que la administración debería sentarse ya a negociar con los acreedores de la AAA, la cual no solo tiene una pesada carga de deuda, sino que tiene próximamente que invertir cientos de millones de dólares en infraestructura y probablemente no tendrá acceso a financiamiento en los mercados.
“En el BGF tienen una situación similar. Es vergonzoso que la semana pasada la presidenta del BGF (Melba Acosta) no pudiera decir si iba a cumplir o no con el pago de unos $170 millones en notas del propio BGF. Finalmente las pagaron el viernes. Pero el clima de incertidumbre que provoca esta constante improvisación y falta de transparencia está destruyendo la poca credibilidad que le va quedando al Gobierno de Puerto Rico”, señaló el comisionado residente.
“Se está evidenciando una falta de voluntad y casi una intención expresa de forzar una situación de impago. Alguien les ha vendido la teoría de que el impago, por un lado les va a liberar dinero para poder gastarlo en otras cosas el resto del año y por otro van a poder obtener mejores resultados de cualquier negociación futura con los bonistas, pues el valor de nuestros bonos va a caer sustancialmente. Eso es una estrategia completamente desenfocada y desacertada, pues el buen nombre de Puerto Rico va a quedar empañado por años”, reiteró Pierluisi.
You must be logged in to post a comment Login