Puerto Rico está en su peor momento social y económico. Ese es un hecho irrefutable. Nadie siente que las cosas andan bien en la isla. Ante ese cuadro fáctico, ¿Cuál es el proceder del liderato popular y el gobierno popular de turno? Sencillo, insistir que la culpa es de todos los gobiernos previos y que no es momento para hablar de la condición colonial de Puerto Rico.
No existe ninguna estrategia, por lo menos conocida o lógica para resolver el grave problema de liquidez que urge atender inmediatamente. Si el colapso financiero del gobierno llega a concretarse, entérese, cero nómina, cero servicios, cero gobierno. Los acreedores reclamarán sus derechos, su dinero y, por perverso, despiadado y abusivo que se vea, ese golpe llegaría y nos lastimaría con severidad. Sería fatal para Puerto Rico.
El Poder Ejecutivo, entiéndase Gobernador y su gabinete, el Poder Legislativo, entiéndase Cámara y Senado, se encuentran estancados, enajenados. Nadie está a cargo. No tienen idea de lo que corresponde hacer para salir del caos provocado por ellos. Sencillamente se les ocurre que quieren el trato de un estado de la unión, siendo colonia; quieren “ahorrar” elevando el gasto gubernamental cada día más y recaudar impuestos en una economía que ellos aniquilaron. Quedan siete largos meses del año fiscal y el gobierno popular no tiene dinero, crédito ni credibilidad. Eso sí que es “jalda arriba”.
Entramos en año electoral y comienza la faena de mentiras, excusas y recriminaciones. Empezaron por la casa. El Gobernador Alejandro García Padilla, Acevedo Vilá y Don Rafael Hernández Colón se lanzaron algunos dardos sobre sus respectivos términos como gobernantes. Empezaron a repartirse un poquito de culpas no muy amistosamente. Se les olvido incluir en los culpables a la colonia. Al ELA que no han podido definir, redefinir, imaginar o rediseñar porque es imposible.
Bueno pues, si no saben, no pueden y no entienden, ¿qué les queda?. Por supuesto, la especialidad de la casa. Culpar a otros y demonizarlos. La soberbia los consume y al mismo tiempo destruye a Puerto Rico. Esa actitud llega al extremo de pretender traer “por los pelos” y en anuncios a exfuncionarios de gobiernos del PNP, que salieron hace casi veinte años del servicio público, para traer desde ese lejano pasado los casos por los que algunos fueron procesados hace casi dos décadas. Como si ese tipo de publicidad excusara el caos actual y la corrupción rampante de este desgobierno del Partido Popular. Así también los líderes colonialistas demuestran su falta de respeto a la inteligencia de este pueblo.
Si habláramos de “robo”, pregunto señor gobernador y legisladores del Partido Popular. ¿El bono de navidad; los reintegros de Hacienda; la pensión de nuestros jubilados y el retiro de nuestros servidores públicos; el sueldo achicado por los impuestos; la beca de los estudiantes de la UPR; las sobre 100 escuelas cerradas; los facilitadores de los niños y niñas de educación especial; el empleo de los guardias escolares; el pago a los suplidores; los servicios de salud de los pobres; los servicios en las procuradurías de los envejecientes, la mujer, el ciudadano, los veteranos, las personas con impedimentos; los fondos de la sala de trauma de Mayagüez; la estabilidad y prosperidad de nuestros empresarios, industriales y comerciantes; los convenios de los trabajadores; las horas extra; la jornada laboral; el pago a la deuda; el crédito y buen nombre de Puerto Rico en los mercados financieros; la inocencia de nuestros niños y niñas en el salón de clases “so color” de educación sexual; los minutos de reflexión y los principios y valores de la familia puertorriqueña, el derecho a la igualdad como ciudadanos americanos, quien se lo “robó”? Fueron 
ustedes. Así que, ¿De qué habla el PPD? Como abogado, les aconsejo… Tienen derecho a guardar silencio.
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