Contrastes

Contrastes – Posted by Solus Lupus

08/27/2016 | Filed under: Campaña | Posted by: Francisco

Contrastes

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ADVERTENCIA: Esto es una columna de opinión, no un concurso de simpatías. Si usted entiende que no tiene la capacidad para leer con la mente abierta la opinión de otras personas sin ofenderse y entrar en cólera con el que escribe; hágase un favor y no continúe leyendo. Su salud mental es más importante para mí. Si por el contrario cree que puede leer otra opinión sin desencajarse y de manera respetuosa, compartir la opinión o incluso de la misma manera respetuosa diferir, siga leyendo. Me encanta crear reacción de manera respetuosa. De las diferencias se alimenta la democracia y del respeto se alimentan los modales.

“La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa.” – Albert Einstein

24 de agosto de 2016

En esta campaña eleccionaria los slogans están como dice mi padre: “A dos por chavo”. Mientras Puerto Rico sigue sumido en la chatarra económica y moral, los candidatos a la gobernación de Puerto Rico y sus respectivas agencias de publicidad, acorde con las instrucciones de sus Directores de Campaña, inundan los medios de comunicación radial, televisiva, y ahora hasta en el internet, de slogans que parecen bonitos, pero si se les analiza, tienen la profundidad de una tesis doctoral de “Molusco”. Lo cierto amigo lector es que mientras usted y yo que salimos todos los días a laborar, no solo para echar para adelante este bendito pedazo de tierra olvidado en el Caribe, sino para mantener a nuestras familias; los jefes de las diferentes campañas políticas solo tratan de tapar las múltiples deficiencias de sus candidatos y en el proceso, vendernos la idílica idea de que tal o cual candidato es la reencarnación del Dalai Lama, Buda, Ghandi, o el mismísimo Mesías. Que ese candidato es lo mejor que ha pasado para la humanidad luego de la invención de la Penicilina. En fin, que los slogans llueven, las propuestas nos persiguen por todos los medios de comunicación, mientras la isla sigue su camino lento pero seguro hacia el abismo.

Pero si los slogans de todos los candidatos tratan de hacernos creer algo que no es, el slogan que hasta el momento lleva ganando la carrera es “Contrastes” del candidato por el (ahora bicefalo partido) PPD, David Bernier. Si amigo lector, porque si los slogans tratan de tapar deficiencias, el de David Bernier trata de hacernos una lobotomía a fin de hacernos olvidar lo que por casi cuatro años ha estado sucediendo en Puerto Rico. Comencemos diciendo que David Bernier es quizás el candidato (si así pudiésemos calificarlo) más flojo que haya tenido el atrevimiento de presentar partido alguno. Es tan falso como las promociones de “El Poder del Shakti”. No solo fue un atleta efímero en el firmamento deportivo, pues solo se le conoce de una medalla de bronce en Centroamericanos en la disciplina de esgrima. Tiene estudios de odontología, entra a ser Presidente del COPUR, donde no se le conoce logro alguno digno de mención. También fungió como director ejecutivo de una agencia del gobierno bajo la administración de Sila Calderón y luego seleccionado como Secretario de Estado bajo Alejandro García Padilla. Cabe señalar que ambos puestos en gabinetes de gobierno, han sido bajo gobiernos altamente mediocres. Luego de renunciar Alejandro García Padilla a ser candidato a la reelección (por razones por demás obvias), se convierte en el candidato de dedo por el Partido Popular Democrático. Ahora, luego de mencionar un breve resumen de la “carrera” profesional de David Bernier, vamos al punto de esta columna.

La semana pasada, y en el programa que transmite por Notiuno David Bernier pudimos escuchar cual será su slogan, su “gancho” para atraer votos a su candidatura. Ese slogan es “Contrastes”. Su directora de campaña quiere establecer ese slogan para marcar diferencias entre David Bernier y los demás candidatos a la gobernación. Y créanme amigos lectores, ese slogan va a ser un exitazo. Les explico el porque.

Hay un tremendo “Contraste” entre la figura de David Bernier y los demás candidatos. Por un lado, el PPD quiere vendernos a un candidato producto de la escuela pública, como queriendo hacernos ver su cuna humilde, pero el propio candidato no cree en la educación pública pues sus hijos estudian en el mismo colegio que los del gobernador. Por supuesto que no en un colegio de clase media. Las acciones siempre hablan mejor que cualquier slogan. Por otro lado su campaña y slogan tratan de hacernos olvidar los 90 impuestos y alzas tarifarías que nos han agasajado en este gobierno de Alejandro García Padilla y de las cuales, muchas leyes a estos efectos fueron firmadas nada más y nada menos que por David Bernier, fungiendo como Gobernador Interino, ya que cada vez que una de estas leyes había que firmarla, el gobernador se iba de Puerto Rico de vacaciones, o para algún fundraising, y su “mano derecha” y quien en múltiples ocasiones anteriores había dicho que compartían la misma visión de política pública, tenía que firmarlas. Pero no solamente eso, David Bernier estuvo cabildeando en la legislatura para que se aprobara el proyecto que hoy permite el alza tarifaria de la Autoridad de Energía Eléctrica. No nos olvidemos de los “contrastes” cuando uno de los subalternos del gobernador o algún legislador han insultado o menospreciado al pueblo de Puerto Rico, Alejandro no ha hecho nada y David ha hecho “mutis”. Ahora incluso, ante la clara evidencia de corrupción rampante del Presidente de la Cámara de Representantes Jaime Perelló, David Bernier calla y dice que le da el espacio necesario. “Contraste” que cuando a Héctor Martínez le informó de que era “target” en una investigación federal, Thomás Rivera Schatz lo sacó fulminantemente de todos los puestos de poder en el Senado, aunque al final, resultase inocente. “Contraste” que mientras ante las situaciones de precariedad económica, David Bernier y el PPD presentan la misma plantilla de legisladores que han llevado a Puerto Rico a su colapso. “Contrastes” que David Bernier utilice como jefe de finanzas a quien está envuelto en el mismo esquema de corrupción de Jaime Perelló en el caso de Anaudi Hernández. “Contrastes” que mientras David pretende venderse como quien tiene mayor preparación y madurez, ante las situaciones en donde se tienen que demostrar galones y fuerza de carácter, David Bernier solo nos deja ver su verdadera personalidad: un candidato pusilánime ante los retos que enfrenta Puerto Rico y una falta de liderato que raya en vergüenza “nacional”. “Contrastes” que mientras otros candidatos presentan sus planes, buenos o malos, completos o incompletos, realistas o irrealistas, David Bernier solo diga que él acogerá todas las propuestas incluso de otros candidatos. En resumen, que otros pasen el trabajo, que yo solo diré y haré lo que mis contrincantes decidan. “Contrastes” que mientras casi todos los candidatos por partidos o independientes asumen posturas claras sobre el status de Puerto Rico, David pretende lobotomizarnos y volver a vendernos la idea de que dejará ese tema “para después”, o sea la postura institucional peremne del PPD, que prefiere dejar a un lado el tema, pues solo le interesa administrar, robar y beneficiarse del dinero de este pueblo. “Contrates” porque mientras David Bernier se vende como un candidato calmado y respetuoso, manda a diario a gatilleros como Jorge “Speedy” Suárez, Ángel Rosa o Héctor Ferrer a lanzar el lodo que él no tiene la espina dorsal para lanzar.

Si vamos a hablar de “Contrastes” señor David Bernier, al menos tenga la deferencia de no tratar de coger de tontos al pueblo de Puerto Rico. Una cosa es cambiar la postura institucional de su partido, y otra hacer exactamente lo mismo y tratar de vendernos la idea de que con los mismos que nos han traído a este desastre y haciendo lo mismo, obtendremos resultados diferentes. Ya decía Albert Einstein: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo.” Puerto Rico está harto de mercadotecnia que nos vende productos engañosos. Ya hemos pasado por Sila, Aníbal y Alejandro. Ahora contrastamos como pueblo y no volveremos a caer en el mismo truco publicitario.